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| Melvin Jones, fundador del Leonismo |
Por: Federico Nakachi Morimoto(*)
En estos tiempos modernos, de adelantos tecnológicos y nuevos descubrimientos,que debieran ser de provecho a la humanidad , algunos tratadistas nos advierten en sendos artículos y libros,que de manera paralela a estos sucesos, se estaría gestando una suerte de movimiento de seres humanos, que estarían apostando por guardar en el "rincón de los recuerdos," las buenas prácticas de cortesía,el respeto a las ideas de los demás, e incluso el espíritu democrático que debe reinar siempre al interior de las organizaciones.
Esta nueva manera de manejar las cosas,no solo estaría sentando sus reales en el campo empresarial sino -incluso- en instituciones sin fines de lucro, que tienen elevados fines que cumplir a favor de la sociedad, donde no debiera haber ni siquiera un atisbo fugaz de querer aceptarlas , por ejemplo: como una práctica normal de llevar una reunión, realizar una actividad o dirigir a un grupo humano.
Pero,siendo al fin y al cabo seres humanos quienes integramos un grupo o institución, corremos el riesgo de caer en la tentación de asumir la imagen que otros tienen de nosotros y no aquella que finalmente nos pertenece,la misma que es nuestro deber mejorar, en busca de una elevación personal,no material sino espiritual.
Recordemos que ya en la Roma de los Césares, cuando el emperador de entonces, marchaba triunfante luego de haber conquistado territorios o vencido en una guerra; tras de él iba un esclavo sosteniendo una corona,quien le recordaba a cada instante: “César recuerda que eres mortal”.
Esta figura de la Roma antigua, bien podría servirnos a todos de profunda reflexión, y muy especialmente a quienes ostentamos temporalmente un mandato o cargo,producto del lenguaje de las urnas, es decir de la elección popular o estatutaria. Y es que, es oportuno recordar, que el poder transforma a los seres humanos, y más aún si se tiene la lejana idea que este será para siempre.
Estas prácticas y formas de actuación,que no forman parte de los usos y costumbres de nuestro movimiento internacional, ojala no se instalen nunca en su seno ;pues si así ocurriera, significaría que no habríamos comprendido aún la razón de ser del Leonismo; que busca incorporar en su seno a seres humanos de buena voluntad, con reconocida vocación de servicio, prestos a brindar ayuda al más necesitado.
Aquí cabe otra reflexión adicional, sobre la manera rigurosa que debemos emplear para seleccionar a los ciudadanos de bien, que debemos invitar a nuestras filas.
Para finalizar, debo enfatizar que quienes tenemos como ejemplo de vida a Melvin Jones,y nos regimos en nuestra vida cotidiana por un código de ética, que ilumina nuestro camino; seguiremos cultivando el compañerismo en todas nuestras acciones , y de igual modo, exaltando nuestra vocación de servicio a los demás, para así forjar y brindar a todos, "un mundo de servicio".
(*) Ex Gobernador Distrito H-4(Perú)
Asesor de Clubes Leo Distrito H-4(Perú)
