Por: Federico Nakachi Morimoto(*)
El hombre es un ser social por definición y busca por tanto realizar su vida en comunidad. El interactuar con otros seres humanos le permite desarrollar cierto tipo de relaciones que contribuyen a su formación como persona.
La asociación voluntaria de personas que se congregan en torno a objetivos comunes, puede llegar a constituir instituciones formales de diverso tipo, de acuerdo a la actividad que desarrollan.
El respeto por las ideas y creencias de los demás hacen posible una convivencia civilizada, y le indica a quien integra una organización, movimiento o asociación, que existen al igual que él otras personas, con la misma libertad de pensamiento, que pueden tener otros puntos de vista, pero con las cuales se puede coincidir en objetivos mayores.
Nuestros Clubes de Leones, se han constituido en base a personas que tienen como factor común la vocación de servicio, que se expresa en el uso combinado de la generosidad y comprensión a favor de los sectores que sufren necesidad. Sea esta causada por un problema de salud -visual-, por furia de la naturaleza, falta de orientación estudiantil, etc.
El Leonismo es, hoy por hoy, una de las más importantes instituciones humanitarias, que se ha situado en un lugar preponderante: la prestación del servicio voluntario, con el sano propósito de brindárselo al mundo, para contribuir a elevar la comprensión entre los pueblos que lo integran, a nivel de país, coadyuvar a la práctica del civismo y del buen gobierno, y en la comunidad, a obtener el bienestar social y moral de sus integrantes.
Pero, para lograr estos objetivos elevados, el Leonismo no cesará nunca de trazarse metas cada vez más altas. Entendiendo que es esta, una de las mejores maneras de poder servir mejor a la humanidad.
Sin embargo, queda entendido, que para alcanzar tanto las metas propuestas, así como obtener los grandes objetivos generales, que se han enunciado en nuestro ordenamiento institucional y que sirven de marco de actuación, es necesario desarrollar unas buenas relaciones al interior de nuestros Clubes.
Estas relaciones, se derivan tanto de la práctica cotidiana del servicio a los demás, como de la interrelación del compartir, no solo nuestro tiempo en asambleas, actividades, cursos, y otro tipo de reuniones, que potencian el compañerismo y la amistad; sino como lo enunciáramos al inicio de este breve artículo, en el respeto a las ideas de los demás y en el fomento del espíritu de cuerpo institucional.
Es así, que el Leonismo, ofrece una magnífica oportunidad a sus miembros, de poder ser actores del cambio que requiere el mundo, que nos ha tocado vivir y que empieza en nosotros mismos, en nuestros Clubes, en la comunidad en la que interactuamos y el país que tanto amamos; lo cual está muy bien sintetizado en nuestro Lema: Nosotros Servimos. No hay más que decir.
(*) Ex Gobernador Distrito H-4(Perú)
Asesor Nacional de Relaciones Públicas
Distrito Múltiple H-Perú
